Sáb. Nov 23rd, 2024

Palestra / Ciudad de México

El Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y autoridades de Quintana Roo lograron un acuerdo con pobladores y ejidatarios a fin de intervenir y proteger la zona arqueológica de Cobá como parte de las acciones de salvamento del patrimonio en la construcción del Tren Maya, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador. 

“Al principio había algunas diferencias en los pobladores de Cobá, ejidatarios que estaban renuentes a que se interviniera en la zona, sobre todo por la cuestión de los ingresos, pero había una falta de comunicación (…) y ya se llegó a un arreglo”, subrayó en conferencia matutina.

El director general del INAH, Diego Prieto Hernández, detalló que al sumar a Cobá al Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza) serán intervenidos 27 sitios en total: once de Quintana Roo; diez de Yucatán; cuatro de Campeche; uno de Tabasco y uno de Chiapas.

En Cobá, cuyo nombre significa ‘tierra húmeda’ o ‘agua turbia’, se llevarán a cabo diversas tareas de investigación, conservación y apertura de nuevas áreas al público, entre ellas el arreglo y acondicionamiento de más de 3 mil 400 metros lineales de senderos interpretativos.

Se construirá también una nueva unidad de servicios, un campamento arqueológico, módulos de investigación y un depósito de bienes culturales; además se habilitarán ciclovías. A su vez se instalará un Centro de Atención a Visitantes (Catvi) y un museo comunitario que mejorará la experiencia y comprensión de la historia del sitio.

“Un proyecto como el Tren Maya (…) nos permite, al mismo tiempo, construir el futuro, recuperar nuestro pasado y reconfigurar el presente fortaleciendo la recuperación de nuestro pasado, de la vida y devenir de nuestros ancestros, nuestra identidad, nuestro sentido de origen y de pertenencia”, destacó el titular del INAH.

Durante el reporte de rescate arqueológico al 27 de julio dio a conocer que los tramos 1 al 7 cuentan con el 100 por ciento de visto bueno de obra, de modo que el tendido de vía del Tren Maya y obras complementarias como talleres y cocheras marchan sin contratiempos.

A la fecha se registraron:

  • 53 mil 445 bienes inmuebles como cimientos, basamentos, estructuras y albarradas.
  • Un millón 193 mil 562 fragmentos de cerámica analizados que serán resguardados en laboratorios.
  • Mil 925 bienes muebles, entre metates, cerámica, lítica, herramientas y figurillas.
  • 767 vasijas en proceso de análisis y restauración.
  • 635 osamentas.
  • 2 mil 242 rasgos naturales como cuevas, cenotes y grutas asociadas a la presencia de grupos humanos y ritualidad de las culturas mayas.

La recuperación de materiales e información arqueológica, dijo, tiene un menor ritmo, pero no significa que haya terminado el salvamento porque continúan las labores de tratamiento, limpieza, clasificación, ordenamiento, sistematización y digitalización con el propósito de construir un marco interpretativo.

“Se combina la preservación del aspecto cultural y el aspecto natural del paisaje, por lo que siempre nos hacemos cargo de una obra que cuide el patrimonio cultural, que cuide el medio ambiente y, por supuesto, también que reivindique la dignidad y las oportunidades de desarrollo, las oportunidades de bienestar para la población”, apuntó.

Actualmente el INAH trabaja en habilitar seis museos de sitio: Palenque, Dzibilchaltún, de la Ruta Puuc en Kabah, de la Costa Oriental en Tulum, el Gran Museo de Chichén Itzá y Calakmul.