Palestra / San Luis Potosí
En el marco de la «Jornada de feminismo y derecho. Deudas y frentes abiertos en el reconocimiento de los Derechos de las Mujeres y el acceso a la justicia», efectuada en el Auditorio «Abogado Ponciano Arriaga Leija» de la Facultad de Derecho, se llevó a cabo el Panel «Violencia y explotación sexual y reproductiva».
Esta actividad como parte de la XXIV Semana de Derecho y Criminología, fue organizada por la Mtra. Claudia Espinosa Almaguer, catedrática de la UASLP, abogada y fundadora de Mujeres Feministas.
En su intervención detalló el porqué de la realización de la Jornada de feminismo y derecho. Dio a conocer que México tiene el 70 por ciento del territorio con una alerta de violencia de género, hasta final del mes de septiembre de este año se tenía una gran cantidad de incidentes de violencia contra las mujeres tan solo en llamadas al 911.
Destacó que el panel que abordó el tema de la violencia sexual y reproductiva se pensó en dos vertientes: deudas y frentes abiertos, «la deuda se ejerce para lo tipificado en la ley, y en México solo se denuncian de estas prácticas uno de cada 10 delitos contra las mujeres, y de esa cifra solo 1 por ciento acaba en sentencia, es decir en sanción».
Espinosa Almaguer, dijo que entonces los frentes abiertos son algunas formas de violencia sexual que se están dejando pasar; que se nos está vendiendo como un empoderamiento y lleva de paso el tema de la explotación reproductiva.
«Es decir, esa libertad de vender tu cuerpo, esta cosificación de la mujer para que te convenzas y dejes de ser sujeta de derechos humanos. Una de las características del feminismo es tener representación internacional, tenemos muy fijas las formas, la trata de personas, la prostitución ajena, trata, y vientres de alquiler».
Invitó a las y los presentes, pero, sobre todo a las estudiantes identificar antes de trasladar a un contexto jurídico, en la vida cotidiana, cómo se imaginan adaptarse a la idea de ser un objeto y hacer un only fans, prostituirse, y llamarle trabajo.
«Cómo imaginan la violencia sexual, piensen en su cotidiano de cómo se está vendiendo esta oferta de poner fotos, subir el acompañamiento, tener página de only fans para sacar dinero como si fuera algo libre, pues, es tu cuerpo; esa misma trampa es para los vientres de alquiler, normalizar la violencia sexual que, aunque se perfume y maquille no deja de serlo».
A su vez, la abogada española y activista feminista, Núria González López, fundadora de L´Escola A.C, sostuvo que el feminismo no odia a los hombres, solo a los violentadores, los que compran niños a mujeres pobres y las explotan, «deben ser odiados y señalados, ustedes que estudian esta carrera deben saber que el Derecho es un reflejo de lo que está bien o mal en la sociedad».
La activista aseguró que lo que mueve la industria de la prostitución es el patriarcado, «quienes hemos estudiado los vientres de alquiler, sabemos que una parte importante del mercado son parejas de hombres u hombres solos. Por ello, tenemos la obligación de señalar a los violentadores, los que hacen mal a los vientres de alquiler».
Añadió que para la sociedad patriarcal todos estos derechos y normas solo están pensadas para la mitad de la población porque para la otra parte las mujeres no están pensadas como personas si se pensara no existiría la explotación reproductiva.
“Lo que hace malo a los vientres de alquiler no es que pagues por ello, sino la vuelta a la esclavitud que las personas son disponibles para el mercado gratis o pagando” sutil violencia que las mujeres siempre debemos sacrificarnos por alguien. Subrayó.
Finalmente, Sandra L. Ramírez Rave, cofundadora y activista de la Corporación Mujer Denuncia y Muévete, mencionó que en Colombia lo que llaman prostitución, en realidad es explotación, en un país donde la guerra, el narcotráfico, la migración, siempre ha llevado a la trata de personas y, sobre todo, de las mujeres.
«Las mujeres son víctimas de explotación en Colombia, acuden a las autoridades donde reciben toda cantidad de revictimizaciones, esto hace que se echen para atrás en denuncias y caigan nuevamente en la explotación».
Las panelistas invitaron a las mujeres que se están formando en la profesión del Derecho advertir estas situaciones de explotación sexual y reproductiva y no ser indiferentes.
Como moderadora participó la política y abogada Mar Grecia Oliva Guerrero.