Palestra / San Luis Potosí
Tomás Flores Aradillas, presidente del Colegio de Contadores Públicos de San Luis Potosí, indica que en el estado existe el registro de unos 12 mil Contadores Públicos, pero desafortunadamente hay quienes son charlatanes, otros más ejercen sin ética profesional, los hay también quienes abaratan el ejercicio laboral a pesar de que guardan una fuerte responsabilidad legal frente al trabajo que desempeñan, por eso se les pide tener toda clase de cuidados.
«Los colegas a nivel estatal, están escritos alrededor de 500 miembros activos que son los que ahorita están participando. Son de la región huasteca, altiplano, media, y más de la zona centro, formamos comisiones de trabajo de todos los temas, ya sea fiscal, finanzas, gubernamental, de seguridad social, de prevención, de lavado de dinero, y de muchas comisiones dentro del mismo colegio. De ahí, desarrollamos ciertos criterios que existen en la actualidad, se estudian y se desarrolla información al respecto y se envía a muchas instituciones como Hacienda, el IMSS, el ISSSTE, que mueven o publican ciertas reformas a nivel nacional, porque nosotros las estudiamos para emitir un análisis técnico».
El Colegio de Contadores es muy dinámico porque tienen unas 20 comisiones que aprenden, se capacitan y generan una opinión técnica hacia la sociedad. Ese es el baluarte de la existencia de este tipo de organizaciones civiles y de profesionistas.
Han detectado que los principales problemas de los contadores del país es que hay muchos «chicharacheros», que son aquellos que abaratan el trabajo de un contador, lamentó que suceda esto porque actualmente hay mucha responsabilidad legal hacia este profesionista y su desempeño «y no se pueden andar cobrando 200 o 500 pesos por prestar un trabajo a un contribuyente. No se considera al contador, como aquel que toma decisiones pero es quien conoce toda la operación de la empresa y es quién sabe qué, cómo y en qué momento se gasta, la manera de pagar los impuestos y cómo se manejan las utilidades».
Sostuvo que este tipo de perfiles genera mucho a la sociedad porque atiende a las pequeñas, medianas y grandes empresas y reconoció que en muchas ocasiones, solamente se le busca a este tipo de trabajadores para presentar declaraciones fiscales o estados financieros que les piden.
Tiene identificado que en áreas rurales o las alejadas a las cabeceras municipales, es donde hay pequeños contribuyentes o donde no hay un fuerte desarrollo económico, es donde generalmente ocurre esta situación «ahí el contador que sale de las universidades va a atender changarros, les cobra 500 pesos por los servicios, pero la responsabilidad que tiene es demasiada, entonces creo que será más en esa zona huasteca un pequeño comercio, una tiendita a veces no tiene la estructura suficiente para hacer le frente a todos estos conceptos, hay muchas necesidades, pero desgraciadamente no se paga el servicio como debe ser».