Palestra / Noticias ONU
En Papúa Nueva Guinea, unas 2000 personas siguen sepultadas tras el devastador corrimiento de tierras del viernes en la provincia de Enga. Las agencias de Naciones Unidas están ayudando a las autoridades locales en las labores de búsqueda y recuperación.
El proceso sigue siendo extremadamente difícil ya que el terreno es muy inestable. Hoy mismo, se derrumbó un puente que era una de las principales vías de acceso a esta zona.
“Lo que se necesita ahora, obviamente, es acceso a agua limpia; gran parte del agua a la que normalmente tendría acceso la comunidad está ya bajo los escombros. Así que, además de eso, hay que proporcionar alimentos, por supuesto, ropa, artículos de abrigo, utensilios de cocina, cualquier cosa que intente aliviar las penurias a las que se enfrenta la gente en estos momentos”, dijo Itayi Viriri, de la Organización Internacional para las Migraciones.
UNICEF calcula que más del 40% de los afectados son niños menores de 16 años que han quedado profundamente traumatizados por la pérdida de sus familias, sus hogares y sus medios de subsistencia.