Vermouth Deportivo / Eurocopa
Die Mannschaft logró el objetivo y avanzó a cuartos de final de la Eurocopa. En un partido no apto para cardíacos, los de Julian Nagelsmann derrotaron por 2 a 0 a la Dinamita Colorada con goles de Kai Havertz y Jamal Musiala.
Pasó de todo en la noche de Dortmund. Los rayos, el diluvio y el granizo interrumpieron el partido durante 24 minutos. No conformes con ello, el VAR le anuló un gol a Alemania en el inicio del primer tiempo y otro a Dinamarca en el comienzo de la segunda parte.
Los locales se pusieron en ventaja a los 3 minutos del período inicial con un cabezazo de Nico Schlotterbeck. Sin embargo el festejo duró poco y nada porque Michael Oliver invalidó la conquista comprendiendo que Joshua Kimmich se interpuso y molestó a Kasper Schmeichel.
Alemania era una orquesta, dominaba y complicaba a Dinamarca. De ese gol anulado hasta los 10 del primer tiempo, Schmeichel le tapó un cabezazo a Schlotterbeck que buscaba revancha, un misíl a Kimmich y una volea venenosa a Kai Havertz.
El control para el dueño de casa fue mermando, la visita empezó a decodificar las ideas de Nagelsmann y apostó también en ofensiva con algunas buenas intenciones de Rasmus Höjlund y Christian Eriksen. Sin embargo, todo eso pasó a segundo plano.
Cuando Dinamarca le nublaba el panorama a Alemania, el diluvio con descargas eléctricas y granizo hizo que Michael Oliver suspenda el juego. Iban 34 de la etapa inicial y necesitaron otros 24 minutos para volver a jugar en la noche de Dortmund.
En cuanto el juego se reanudó la contienda, Die Mannschaft coqueteó con el triunfo en un cabezazo de Havertz que tapó Schmeichel de manera maravillosa. También llegó la Dinamita Colorada pero Höjlund no pudo en el mano a mano con Manuel Neuer.
Si el partido de octavos de final ya era de locos durante los 45 minutos iniciales, el inicio de la complementaria completó la obra maestra. Dinamarca puso el 1 a 0 cuando recién empezaba la etapa decisiva pero el VAR se encargó de anularlo.
Iban 2 del segundo tiempo cuando Joachim Andersen definió de zurda para sacudir a todo Alemania. Sin embargo, Michael Oliver se apoyó en la tecnología que observó un milimétrico offside de Thomas Delaney y todo volvió a estar 0 a 0.
Cuando Die Mannschaft reanudó con pelota al piso llegó el desborde de David Raum. El zaguero levantó el centro y la pelota dio en la mano de Andersen que, en un parpadeo, pasó de héroe a villano. El árbitro también fue al VAR, sancionó el penal y Havertz colocó el 1 a 0 desde los doce pasos.
Ya con el resultado abierto, los de Nageslamnn encontraron espacios y liquidaron la historia. Havertz dilapidó un mano a mano pero Musiala no y colocó cifras definitivas. Sobre el cierre, Florian Wirtz maracaba un tanto sumamente delicioso pero quedó anulado.
Dinamarca hizo un gran partido en la noche de Dortmund y fue protagonista de uno de los partidos más memorables de los últimos tiempos. Alemania ganó 2 a 0 y se metió en cuartos de final de la Eurocopa donde se reencontrará con Suiza en la próxima instancia.