Armando César Calderón V. / Palestra
Colombia venció a Uruguay (1-0) y avanzó a la final de la Copa América, donde buscarán levantar el trofeo continental por segunda ocasión en su historia, pero la noticia que le dio la vuelta al mundo fue la batalla campal que tuvo como protagonistas a los jugadores de la Selección Uruguaya y aficionados colombianos.
Tras el pitido final hubo discusiones en las gradas, que rápidamente escalaron a una pelea masiva, según la versión de algunos futbolistas uruguayos, la afición colombiana se metió con sus familias, en ese instante fue cuándo distintos jugadores (principalmente Darwin Núñez) entraron a pelear con aficionados cafetaleros, en una imagen le dio la vuelta al mundo.
José María Giménez, capitán de Uruguay, declaró: “Déjame decirte una cosa, que por favor tengan cuidado, porque un sector de Colombia le hizo una avalancha a todas nuestras familias y no nos dejan hablar en el micrófono. Lo voy a decir ahora porque si no te cortan, esto es un desastre. Nuestra familia corrió peligro, tuvimos que meternos como pedo para arriba de la tribuna a sacar a nuestros seres queridos, bebés chiquitos recién nacidos”, comentó el uruguayo.
La CONMEBOL sacó un comunicado ‘condenando’ los hechos:
Para un gran sector de la afición, un comunicado que se queda muy corto para la magnitud de lo sucedido. Por el momento desconoce si hubo detenidos y cuales serán sus consecuencias, de lo que ya se habla es de una sanción histórica para Darwin Núñez, uno de los principales señalados:
Hasta el momento la CONMEBOL no ha emitido una sanción en contra de Darwin Núñez, por estatutos de la FIFA el delantero uruguayo podría recibir mínimo tres partidos de suspensión de todas las competencias deportiva, aunque por la gravedad del asunto se rumora que la sanción podría incrementarse a partir los siete partidos de suspensión más una multa económica.