Palestra / La Ratonera
El gobernador Ricardo Gallardo salió bien librado de la doble visita presidencial de Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum al Centro de Convenciones de San Luis Potosí, para tratar un tema inédito y de suma importancia nacional: Balance Económico: Desarrollo Industrial y T-MEC.
Queda claro que, a diferencia de otros estados donde López Obrador ya se ha despedido, acompañado de su sucesora, hay posibilidades de una próxima visita y quizá también con Sheinbaum, porque queda pendiente la inauguración a medias de la carretera Valles-Tamazunchale o del Hospital General de Rioverde que ya es IMSS-Bienestar y, si nos apresuran, la primera piedra de la cacareada expansión del aeropuerto de Tamuín que nomás no puede concretarse.
Políticamente, de cara al público, no hubo ningún trato diferente de AMLO y Sheinbaum con Gallardo, al que han tenido en anteriores encuentros. Ambos lo saludaron, abrazaron, platicaron y se rieron con el gobernante potosino antes, durante y después del evento. No se notó frialdad ni tampoco displicencia. Hubo abucheos en su contra, sí, de morenistas presentes en el evento, pero también porras de los suyos del PVEM.
Y lo mejor de todo, es que Sheinbaum y AMLO se vieron cómodos y contentos. Punto para Gallardo tras las tensiones que provocaron las disputas electorales PVEM-Morena del pasado 2 de junio… por el momento.
Al parecer, la primera cita política Gallardo-Galindo fue debut y despedida, por lo que esta historia se terminó muy pronto.
Como se recordará, ambos mandatarios -estatal y capitalino- se reunieron en privado hace algunos días, pero el gobernador calló. El único que salió a decir que el encuentro había sido perfecto, fue el alcalde de San Luis Potosí.
La prueba está en que Gallardo dijo recientemente que mientras Galindo no le pida apoyo formal, su gobierno no intervendrá en la limpieza del lirio que aqueja a la presa San José… y eso que Galindo había anunciado con anticipación que una de sus principales solicitudes sería darle solución a la distribución de agua para las familias que carecen del líquido.
O Galindo no sabe pedir o simplemente Gallardo le hizo el caldo gordo con ese cara a cara que no sirvió ni para la foto.
Hablando de Enrique Galindo, ahora resulta que es un malagradecido… y tiene razón el PRI.
Por la candidatura del señor, dijo Alberto Rojo Zavaleta, Secretario Técnico del Consejo Político Estatal, se «sacrificaron» las candidaturas en Ciudad Valles, Matehuala, Rioverde, Xilitla y hasta encabezar la primera fórmula de la candidatura al Senado. Aunque también hay que decir, que ni modo que las hubieran ganado, si el tricolor está para el arrastre.
Lo anterior, para mantener en orden las candidaturas de la coalición con el PAN y el PRD.
El caso es que poco a poco sale a relucir el cada vez mayor distanciamiento de Galindo con su alma máter política, por razones que sólo ellos conocen, porque las críticas del alcalde reelecto a su líder nacional Alejandro «Alito» Moreno, son un pretexto.