La Ratonera / Palestra
La farsa del Congreso del Estado para seleccionar al Concejo Municipal de Villa de Pozos pretende ser democrática con la validación del Ceepac.
Quién sabe si en el famoso dictamen aparezca algún método para tomar esta decisión tan importante para la gobernanza del municipio 59 de San Luis Potosí, pero el presidente de la Comisión de Gobernación, José Luis «Chiquis» Fernández, adelantó que «todas las fuerzas políticas estarán debidamente representadas».
¿Y cómo lo harán?, con los resultados electorales de las secciones en Villa de Pozos. Dicho de otra manera, empieza la repartición del botín conseguido el 2 de junio y a nadie deberá sorprender que el partido al mando del estado, el PVEM, sea el que se lleve la mayoría de concejales.
Por eso, lo que ayer acusaron ciudadanos de Pozos en cuanto a que el Verde está metido «hasta las narices» en el proceso, no fue descubrir el hilo negro.
Bueno, lo que sí sorprende es que el PRIAN ande dormido en sus laureles, como si hubiese sido la coalición del «carro completo» en los pasados comicios…
Aunque el alcalde capitalino Enrique Galindo minimizó la salida del encargado de su programa más famoso de gobierno, «Vialidades Potosinas», para incorporarse al ayuntamiento de Monterrey invitado por el alcalde electo Adrián Emilio de la Garza Santos, lo cierto es que Nazario Pineda Osorio se lleva consigo un trabajo difícil de sustituir.
Y no es que estas acciones de obra sean una lumbrera, pero deja tirado el proyecto, lo que habla del «compromiso» que tenía con el priista. Está rara esta salida y si fue por dinero, Galindo no debió escatimar, al fin que tiene al ayuntamiento más obeso en nómina y nomás no la adelgaza, porque sirve a sus pretensiones políticas.
De cualquier forma, se antoja un corte de caja de «Vialidades Potosinas», como sabemos, un agresivo programa de pavimento que no contempla al peatón ni a los ciclistas, sino sólo a los automotores. Ya son varios los llamados para que Galindo enriquezca su idea y dé un viraje más hacia la protección del medio ambiente, pero actúa como Salinas, porque ni ve ni oye.
Trabajar en el gobierno de Ricardo Gallardo es una bomba de tiempo para cualquiera del Gabinete Legal y Ampliado, a juzgar por los 19 cambios de titulares que ha realizado a lo largo de su sexenio.
La interesante y oportuna nota que publicó el reportero Sebastián Escorza en El Sol de San Luis, da cuenta de todas y cada una de las secretarías que han sufrido la guadaña del mandatario, quien se ha distinguido por tener «pocas pulgas» al momento de exigir resultados.
Aunque sin quedar claro para qué sirve el semáforo que mide el desempeño de cada cartera mes con mes, a final de cuentas es una facultad de Gallardo nombrar y remover a quien le plazca, por ser titular del Poder Ejecutivo en San Luis Potosí.
Entre Turismo y -pian pianito- Sedeco, juntan nueve secretarios fijos o interinos, lo que da cuenta de dónde no está a gusto el gobernador.
Lo único que sí le pide la porra es que si va hacer cambios en la cancha, sea un técnico parejo, porque empezó muy bien con «El Chiquilín» en el Archivo Histórico, por un escándalo policiaco, pero luego se ha tentado mucho el corazón con sus demás cuates, no todos han respondido y siguen arrastrando los tacos durante el juego, pero sin tocar el balón.