Palestra / Ciudad Valles
Por última vez, la oficial Amelia Ponce Torres, puso su huella dentro del reloj checador de la jefatura de región Zona Huasteca, en Ciudad Valles, un lugar que fue su segundo hogar por gran parte de su carrera como policía al servicio de la seguridad en el Estado potosino. Este mes de septiembre, marcó la hora de su último día de labores, despidiéndose con orgullo, nostalgia y felicidad de su familia de sangre azul.
Amelia es parte de la Generación XX de Protección Social y Vialidad, arrancó sus labores operativas en destacados agrupamientos, tales como el Alfa, un grupo nada fácil, que ponía de muestra la disciplina, destreza y entrega a sus diferentes servicios. Con su uniforme negro, camuflada en los diferentes terrenos, Ponce Torres exploró diferentes municipios, guiada por la convicción de proteger a las familias potosinas.
También fue partícipe de un área enfocada en la proximidad social, prevención y contención de delitos, en la zona centro de la capital potosina: el área Hidalgo, destacando su nobleza, espíritu de servicio y altruismo con la ciudadanía, se consolidó su formación en otra área diferente a las del combate a la delincuencia de alto impacto, siendo una oficial de policía con destacadas habilidades.
A su vez, guiada por los nuevos retos para su carrera como policía, fue asignada a un grupo especial para protección a funcionarios, en donde no solo continuó demostrando “la fibra con la que nos forjamos dentro de las aulas de nuestra academia, sino de los aprendizajes que nos dejó cada jefe con quien trabajamos, nuestros compañeros y compañeras, cada vivencia que nos formó esa armadura de policía”.
Posteriormente su última encomienda fue en la Academia de Seguridad Estatal, ubicada en la región Huasteca, con el propósito de compartir sus experiencias a las nuevas generaciones de policía que, así como ella, decidieron iniciar en esta noble y ardua profesión.
Para Amelia un ciclo ha culminado, lleno de grandes recuerdos, también de tristeza, por los compañeros que cayeron en cumplimiento de su deber y que llevará en su memoria por siempre, pero también uno nuevo comienza, con el proyecto de una etapa nueva en su vida, misma que ahora tiene grandes hermanos: sus hermanos de sangre azul.
Hoy que se despide una gran oficial de policía de las filas de la Guardia Civil Estatal, para la institución es motivo de orgullo su historia, entrega y disciplina, que forjaron su camino, mismo que será replicado por las nuevas generaciones que día con día hacen el cambio por construir un Estado seguro. ¡Enhorabuena! Amelia Ponce Torres policía A de la Guardia Civil Estatal. Gracias por tus 28 años de entrega y servicio dedicado a la seguridad de tu tierra potosina.