Palestra / San Luis Potosí
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en San Luis Potosí promueve la toma de ácido fólico en las mujeres que desean ser mamás, antes y durante el periodo de gestación con el objetivo de prevenir diversos problemas de tipo neurológico del bebé.
El médico especialista, Carlos Reyes Segovia, coordinador de Prevención y Atención a la Salud, indicó que, es importante tomar ácido fólico entre los 3 y 6 meses antes del embarazo y en el primer trimestre de la gestación; incluso su ingesta se puede prolongar a los 9 meses.
Agregó que, el ácido fólico previene diversos problemas que pueden surgir en el cerebro del bebé y en el sistema nervioso, ya que dañan la columna vertebral, al tiempo de proteger a la mujer de la anemia y disminuir el riesgo de bebés con bajo peso y parto prematuro.
El doctor Carlos Reyes Segovia, coordinador de Prevención y Atención a la Salud, señaló que, la toma de una pastilla diaria de esta vitamina permite obtener diversos beneficios al estimular las células que forman al bebé y que se produzcan de manera normal y armónica, permitiendo el desarrollo correcto de los rasgos genéticos y hereditarios.
Señaló que, la mujer debe acudir a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) donde se le brindará la atención de consulta prenatal y, además, las indicaciones para la toma de ácido fólico.
En caso de que no haya sido posible la ingesta de ácido fólico previo al embarazo, es de gran importancia que se tome durante los primeros 3 meses, ya que es durante las primeras semanas de gestación cuando se desarrolla el sistema nervioso del bebé y es el momento en que puede prevenirse alguna deficiencia que provoca las alteraciones señaladas.
“Conocer y prestar atención a diversos síntomas relacionados con la deficiencia de ácido fólico, como cansancio, dolor de cabeza, palidez, úlceras en boca o lengua, trastornos del sueño y falta de memoria”, indicó el especialista Reyes Segovia.
“Esta vitamina, también conocida como folatos, tiene su origen en las hojas verdes, por lo que se aconseja que antes y durante todo el embarazo, la mujer incluya en su dieta diaria el consumo de alimentos naturales como: espinaca, berros, brócoli, lechuga, aguacate, habas, chícharos, frijoles, almendras; también en alimentos de origen animal como: hígado y vísceras, y en las frutas como: toronja, naranja y plátano, así como en cereales adicionados con vitamina B9”, recomendó.
Para aprovechar el contenido de folatos en estos alimentos, mencionó que hay que evitar exponerlos a altas temperaturas, ya que son sensibles al calor y se disuelven en agua, por lo que hay que consumir los vegetales crudos y los productos de origen animal únicamente asados a la plancha.
Comentó que toda mujer con sospecha de embarazo debe acudir a consulta a su Unidad de Medicina Familiar para recibir la atención oportuna y adecuada durante todo el embarazo.