Palestra / San Luis Potosí
La doctora Daniela Edith Salado Leza, investigadora por México adscrita al Instituto de Física, y la licenciada Fernanda Silva, estudiante de la Maestría en Ciencias Químicas, de la Facultad de Ciencias Químicas, ambas de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), llevaron a cabo una estancia académica en el Instituto de Ciencias Moleculares de Orsay, en Francia, para continuar con el desarrollo de un proyecto de ciencia de frontera, cuyo objetivo es mejorar la radioterapia con menos efectos secundarios para los pacientes.
Dicha permanencia en el Instituto, que pertenece a la Université Paris-Sud, recibió apoyo a través de la Convocatoria de proyectos para fortalecer la formación de recursos humanos en investigación, desarrollo tecnológico e innovación, del Consejo Potosino de Ciencia y Tecnología (Copocyt), así como con el respaldo del Posgrado en Ciencias Químicas.
Tanto la docente, como la estudiante a llegaron a Orsay en diferentes fechas. Mientras la doctora Salado Leza arribó a inicios de noviembre del 2024, la licenciada Fernanda Silva lo hizo a principios de diciembre, ambas con el objetivo de realizar un trabajo experimental y reforzar la colaboración con la universidad parisina, con la cual la catedrática de la UASLP ya había trabajado durante sus estudios de posgrado.
Como parte de la estancia en el Instituto de Ciencias Moleculares, desarrollaron un proyecto de nanopartículas de manera sustentable, que busca potenciar el resultado de la radioterapia y disminuir sus efectos secundarios, de manera que se requieran menos dosis, pero más efectivas en pacientes con cáncer.
“Las nanopartículas que desarrollé están conformadas por un metal pesado que es el bismuto y desechos agroindustriales en este caso de cáscara de toronja. Eso fue lo que llamó la atención de los investigadores de ese país”, explicó Fernanda Silva. Pese a que su estancia fue breve, la estudiante participó además en varios congresos y foros internacionales en ese país, para dar a conocer los detalles del proyecto, que forma parte de su tesis de maestría.
“Sin duda, el inglés me dio la oportunidad de comunicarme, estuve en un congreso virtual con doctores de todo el mundo, desde Brasil, Japón, China, Israel y con dos investigadores de México, uno el Instituto Politécnico Nacional y otro de la Universidad Autónoma de Hidalgo. De manera presencial, también formé parte de un workshop sobre nanopartículas para radioterapia en la Universidad de París. Finalmente, compartí un cartel donde presenté los resultados de este trabajo, para divulgarlo de manera internacional, que era uno de los fines de mi viaje”, comentó.
Por su parte, la doctora Daniela Salado dio a conocer que, gracias a la colaboración con el Instituto de Ciencias Moleculares, pudieron tener acceso a fuentes de radiación que imitan a la utilizada en las terapias y tuvieron la oportunidad de emplear diferentes modelos para corroborar si asemejan a los desarrollados en el Laboratorio del Instituto de Física de la UASLP.
“Tuvimos acceso a fuentes de cobalto 60, un isotopo radioactivo que permite ver de manera molecular si hay rompimiento de enlaces químicos, por ejemplo, en biomoléculas que son importantes para que un tumor siga desarrollándose. La otra colaboración se desarrolló en el Instituto Curie, donde utilizamos una fuente de rayos X similar a los aceleradores que ya se usan en los hospitales”, explicó.
“Utilizamos un modelo celular de cáncer cervicouterino, esperamos lograr el diseño de un material que en un futuro pueda utilizarse como auxiliar en radioterapia, potencializar lo que hay en clínica a través de estas estrategias sencillas, económicas y hechas en México”, finalizó la científica universitaria.