Palestra / Ciudad de México
Con la aprobación de la reforma, por parte del Senado, sobre no reelección y nepotismo electoral propuesto por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, la senadora verdeecologista, Ruth González Silva, podrá competir por la candidatura al Gobierno de San Luis Potosí en 2027, lo que generó un fuerte intercambio de palabras con el senador panista, Marko Cortés Mendoza.
La reforma es a los artículos 55, 59, 82, 115, 116 y 122 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y aplicará en el caso del no nepotismo, hasta 2030, por lo que González, que es esposa del gobernador Ricardo Gallardo Cardona, también del PVEM, tiene libertad de postularse sin ningún impedimento legal.
Cabe destacar que la propuesta de aplazar la reforma sobre el no nepotismo hasta 2023 corrió a cargo del propio PVEM, con el apoyo del poderoso Morena y su otro aliado político, el PT, para la reserva. El dictamen de reforma fue avalado de forma unánime con 127 votos a favor.
Cortés afirmó que el coordinador de Morena en el Senado, Adán Augusto López, quien presentó la reserva a nombre del coordinador verde Manuel Velasco Coello, “busca retrasar la iniciativa para pagar favores políticos” a personajes que se postularán a las elecciones en 2027.
Entre quienes podrán competir en 2027 están los también senadores Saúl Monreal, hermano del gobernador de Zacatecas, David Monreal, además de Félix Salgado Macedonio, padre de la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda.
En respuesta a las críticas de Marko Cortés y el resto de la oposición en el Senado, la potosina Ruth González le respondió a Marko Cortés que, a diferencia de ella, él no fue elegido por la ciudadanía en las urnas, sino que ocupó en primer lugar una senaduría plurinominal.
“Yo fui electa por el pueblo de San Luis Potosí con más de 526 mil votos; usted es un legislador que no fue elegido por el voto ciudadano, sino que llegó por la vía plurinominal”. Asimismo, reiteró que en 2027 será el pueblo potosino quien tenga la última palabra sobre el futuro del estado. “La gente decidirá nuevamente, como siempre lo ha hecho. Lo importante no son las especulaciones, sino el trabajo que hacemos día a día para mejorar la vida de quienes confían en nosotros”, señaló.
La senadora destacó que su prioridad es seguir trabajando por el bienestar de San Luis Potosí y no en debates políticos que desvíen la atención de las necesidades reales de la ciudadanía.
“Estoy a favor de cualquier iniciativa que fortalezca la transparencia y combata el nepotismo, pero las leyes deben diseñarse pensando en el bien común, no en nombres específicos. Mi enfoque sigue siendo servir con cercanía, honestidad y resultados tangibles para San Luis Potosí”, afirmó.
Respecto a la alianza entre el Partido Verde y la 4T, González Silva subrayó que esta coalición se basa en principios y objetivos comunes que han permitido avances en infraestructura, programas sociales y desarrollo sustentable.
“Nuestra alianza no es por cargos, es por resultados. Más allá de los partidos, lo que realmente importa es lo que logramos en conjunto para la gente. La ciudadanía espera gobiernos eficaces y comprometidos, y eso es lo que hemos demostrado con hechos, no con discursos”.
“Hoy mi única preocupación es servir con responsabilidad, cercanía y trabajo constante”, concluyó.
DEBATE FUERTE
En la discusión del dictamen, Clemente Castañeda Hoeflich, de Movimiento Ciudadano, señaló que está reforma es promovida desde el poder para preservar el poder, además de ser una “simulación”, porque no se está prohibiendo la reelección, sino que prohíbe la reelección consecutiva, regresando a los tiempos del PRI, por lo que es una reforma “doméstica” y no para las élites.
En cuanto el nepotismo electoral, agregó, que si bien es una práctica que ha perjudicado al sistema político mexicano en su conjunto, esta reforma no la combate realmente, pues de ser así la aplicarían en todos los niveles de gobierno para acabar con los apellidos que buscan expandir una dinastía y conservar el poder; pero, además, por inconformidad de los partidos aliados, Morena modificará la fecha para la entrada en vigor de la reforma del 2027 a 2030.
Alejandro González Yáñez, del PT, indicó que la no reelección está en lo más hondo de la historia de México y de su democracia, mientras que el nepotismo, asentó, es una práctica que construye dinastías, es tráfico de influencias y corrupción, por lo que es necesario “acabar de tajo” con esa práctica “nefasta” y liberar al pueblo del poder de familias.
Añadió que esta reforma es una primera etapa, pues vendrán más reformas electorales que construyan una democracia nueva, un proyecto antineoliberal, pues son los neoliberales los que promovieron la privatización de la política, del poder y del Estado, “vamos a ser consecuentes con nuestros ideales”.
Durante su participación, Waldo Fernández González, del PVEM, aseveró que con esta reforma se van a anteponer los intereses de la nación, por los de una mayoría parlamentaria, pues son aislados los funcionarios que lograron su profesionalización a través de la reelección, pues contrario a ello, son más los que se han perpetuado en los cargos para abusar del poder individual o de grupo.
Refirió que con la reelección se desequilibraron los procesos electorales, y es por eso que, con esta reforma se garantiza la transparencia y la rendición de cuentas, además, se termina con la centralización para poner el interés de la nación por encima de quienes hoy legislan.
Por el PRI, Cristina Ruiz Sandoval, anotó que no le debemos “creer a Morena”, porque mientras dice primero los pobres, la realidad es que es “primero su familia”, de ahí que esta reforma es una “mentira”, lo que significa que no acabarán con el nepotismo, ya que tienen a sus familiares en la nómina del gobierno, y para ejemplo, está la modificación que hicieron para implementar la reforma en 2030 y no en 2027, como lo había mandado en su iniciativa la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Indicó que el poder no debe ser una herencia de familias, sino del pueblo de México, lo que significa que no hay una transformación, pues se está heredando a las familias de Morena el presupuesto del país, lo que no solo es nepotismo, sino “corrupción”. Dijo que no se puede permitir que el país se convierta en una monarquía de apellidos, de amigos y de compadres, “si la presidenta envió esta reforma es porque a muchas y muchos ya los quiere fuera”.
En su turno, María de Jesús Díaz Marmolejo, del PAN, afirmó que no sólo se trata de combatir el nepotismo electoral, sino también el nepotismo para quienes ocupen cargos en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como en los órganos autónomos, pues están convencidos de que los ciudadanos merecen procesos electorales, limpios, justos y equitativos.
Refirió que el nepotismo actualmente se extiende en la administración pública y se convierte en herencia, y es por ello que resulta “inútil” la no reelección inmediata, si se deja abierta la puerta para heredar un cargo o por influencias directas, pues la administración pública no puede ser un negocio de familia, como ya ocurre con familias como los López Obrador y los Batres Guadarrama.
De Morena, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, señaló que con esta reforma se va a acabar la reelección consecutiva y se va a impedir que se enquisten pequeños grupos, toda vez que es una reforma de ética y principios, que pretende evitar que la no reelección y el nepotismo no se dé desde los municipios, porque es ahí donde comienza todo.
Asentó que ante el cuestionamiento que se ha hecho a compañeros como Félix Salgado Macedonio o Saúl Monreal Ávila, por el nepotismo, es importante decir que desde el principio se manifestaron a favor de la reforma. “Aquí ninguno de nosotros venimos a querernos quedar atados a las curules, querer usurpar lo que es del pueblo y que el pueblo en un momento va a tener que definir día con día a quienes quiere en las representaciones populares”.