Sáb. Jun 14th, 2025

The New York Times / Internacionales

Unas explosiones sacudieron Teherán en la madrugada del viernes, y el ministro de Defensa israelí dijo que aviones de guerra de su país habían llevado a cabo un ataque contra Irán, lo que hace temer una guerra entre dos de los ejércitos más poderosos de Medio Oriente.

No quedó clara de inmediato la magnitud del ataque ni los daños que causó. Se esperaba que el ataque provoque represalias rápidas por parte de Irán, probablemente con una gran descarga de misiles balísticos comparable a la que Irán disparó durante escaladas similares el año pasado.

El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, describió el ataque como un “ataque preventivo” y declaró una emergencia especial en todo Israel, diciendo que “se espera un contraataque en un plazo inmediato”. En Jerusalén y otras ciudades sonaron sirenas.

Los habitantes de Teherán, la capital de Irán, dijeron haber oído explosiones grandes, y un funcionario iraní de alto rango dijo que habían despegado aviones de combate para interceptar a los aviones de guerra israelíes.

Mohammad Jamali se encontraba en un techo en Teherán, cerca del lago Chitgar, cuando vio lo que parecían ser dos aviones que se movían rápidamente y atacaban las bases militares cercanas. “Lo que veo son dos enormes llamaradas y humo procedentes de dos bases militares del este de Teherán”, dijo.

El ataque se produjo mientras Estados Unidos dirigía los esfuerzos para negociar un acuerdo con Teherán que limitara la capacidad de Irán de producir armas nucleares y un día después de que el Organismo Internacional de Energía Atómica, el centro de vigilancia nuclear de la ONU, censurara a Irán por no cumplir sus obligaciones de no proliferación nuclear.

El ataque israelí se produjo tras meses de desacuerdo entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, sobre cómo actuar ante Irán. Netanyahu lleva tiempo proponiendo el uso de la fuerza militar para desbaratar las ambiciones nucleares de Irán.

El jueves, Trump volvió a decir que no quería que Israel lanzara un ataque, prediciendo que hacerlo arruinaría la posibilidad de una solución diplomática. “Creo que la echaría por tierra”, dijo. Luego añadió un guiño al otro lado de la ecuación, diciendo que un ataque “podría ayudarlo, en realidad, pero también podría echarlo por tierra”.

Hace varios meses, Trump rechazó un plan israelí de atacar a Irán, insistiendo en que quería tener la oportunidad de negociar un acuerdo con Teherán. Hace dos semanas, Trump dijo que había advertido a Netanyahu de que no lanzara un ataque mientras Estados Unidos negociaba con Irán.

Sin embargo, esas conversaciones fracasaron en las últimas semanas, y no estaba claro cuánto se había esforzado Trump por impedir este último ataque.

El ataque no fue una sorpresa.

El gobierno israelí dañó el sistema de defensa aérea iraní durante sus ataques contra el país el año pasado y había planeado durante meses aprovechar la debilidad de Teherán para organizar nuevos ataques. Anticipándose a una escalada regional, Estados Unidos retiró el miércoles a sus diplomáticos en Irak y autorizó la salida voluntaria de familiares de soldados estadounidenses destinados en otros lugares de Medio Oriente. Una agencia gubernamental británica también advirtió el miércoles de una escalada que podría significar mayores riesgos para los barcos en el golfo Pérsico.

El ataque fue una de las maniobras más descaradas en una lucha de décadas entre Israel e Irán que, hasta el año pasado, solía llevarse a cabo mediante operaciones encubiertas y no declaradas. Durante años, Irán ha financiado milicias regionales que se oponen a la existencia de Israel y ha llevado a cabo ataques clandestinos contra infraestructuras e intereses israelíes. Israel, que se cree que es la única nación con armas nucleares de Medio Oriente, considera el programa nuclear iraní una amenaza existencial y lleva mucho tiempo llevando a cabo sus propios ataques encubiertos contra el programa nuclear, los científicos y otras infraestructuras de Irán.

La guerra en la sombra salió a la luz pública después de que Hamás, el grupo armado respaldado por Irán que ha gobernado Gaza durante mucho tiempo, atacara Israel el 7 de octubre de 2023, lo que dio lugar tanto a la guerra en Gaza como a una confrontación regional más amplia que enfrenta a Israel con Irán y sus apoderados, incluidos Hizbulá en Líbano, grupos armados en Irak y los rebeldes hutíes en Yemen.

El ataque de Israel contra un complejo controlado por Irán en Siria en abril de 2024 provocó que Teherán disparara una enorme cantidad de misiles contra Israel. Irán lanzó un ataque similar el otoño pasado, después de que Israel asesinara a Ismail Haniyeh, dirigente de Hamás, cuando visitaba Irán el verano pasado, y después matara a Hassan Nasrallah, dirigente de Hizbulá.

Información original: www.nytimes.com/es/2025/06/12/espanol/mundo/israel-ataca-iran.html

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