Palestra / San Luis Potosí
Los Servicios de Salud de Gobierno del Estado en este año han brindado apoyo, orientación y capacitación a 43 mil 518 madres, padres, tutores o cuidadores de niñas y niños para reforzar la cultura de seguridad, hábitos y actitudes preventivas, la identificación de factores de riesgo en los domicilios para crear un ambiente seguro para su óptimo desarrollo infantil, indicó el Dr. Juan Sánchez Cárcoba, Coordinador Atención a la Salud de la Infancia y la Adolescencia.
Dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS), estima que cada día podrían evitarse mil defunciones en el mundo mediante acciones de prevención, por cada niño que fallece a causa de una lesión accidental, muchos más posiblemente queden con alguna discapacidad que verá mermada su funcionalidad y calidad de vida, por ello la necesidad de estar alerta y prevenir accidentes que pueden ocurrir dentro de la vivienda o en sus alrededores, es decir, patios, jardines, azoteas, cocheras.
Sánchez Cárcoba, enfatizó que las niñas y niños por la etapa de crecimiento y desarrollo que tienen son curiosos, aventureros y temerarios por naturaleza y en combinación con la falta de medidas de protección en el hogar y espacios no seguros representan algunos de los factores que pueden condicionar la presencia de accidentes. Para prevenir caídas es importante: vigilar, evitar perder de vista y no permitir que niñas y niños se encuentren en superficies elevadas sin supervisión adulta; enseñarles a hacer uso de barandales, poner protectores en escaleras, puertas, terrazas y ventanas.
En cuanto a la prevención de ahogamientos y asfixia, no dejar al alcance de los menores cables, cordones u objetos que puedan enrollarse en sus cuellos fácilmente. Evitar dejar a su alcance bolsas de plástico, objetos pequeños como botones, canicas, monedas, tapas, etc. Y no dejar al alcance de los niños medicamentos, sustancias químicas, tóxicas (Mantener bajo llave de preferencia).
En caso de recreación en albercas o lugares aptos para natación deberá estar presente algún adulto para vigilar, proveer medidas de protección y establecer un entorno seguro. Por otra parte, es bien importante mantener tapadas cisternas, lavaderos, piletas, cubetas, fuentes u otros contenedores donde los niños puedan sumergirse. Evitar que niñas y niños jueguen en la cocina mientras se cocinan los alimentos. En el caso de niñas y niños menores de 1 año, se aconseja ponerlos a dormir en su cuna, vigilar que la cuna no cuente con exceso de cobijas, almohadas y peluches; y para prevenir quemaduras, verificar la temperatura del agua antes de bañarlos, concluyó el Dr. Sánchez Cárcoba.