Palestra / San Luis Potosí
El fenómeno de la sequía lleva más de un año en el territorio potosino, es una condición que está provocando una grave cantidad de problemas, y no solamente en cuanto a la agricultura sino hasta en lo que corresponde al abastecimiento de agua para consumo humano en diferentes comunidades del Estado.
El Dr. José Antonio Ávalos Lozano, coordinador general del Laboratorio de Variabilidad Climática (Variclim) de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), detalló que, en particular, el caso de la huasteca potosina resulta interesante porque presenta condiciones que la hacen en este momento vulnerable a este fenómeno de la sequía y las razones tienen que ver con la variabilidad climática.
El investigador de tiempo completo de la Facultad de Agronomía y Veterinaria (FAV) mencionó que el año pasado se tuvo un déficit en la precipitación que no fue tan intensa y principalmente, el problema fue una onda de calor que afectó en todo el territorio potosino, pero en particular en la huasteca.
“Son fenómenos que forman parte de la variabilidad natural del planeta relacionados con el comportamiento de grandes masas de aire de la atmósfera que son las que regulan, puede ser una ocurrencia de fenómenos como el Niño, la Niña o de otras cuestiones, lo que sí puedo garantizar es que es una condición relacionada con la variabilidad y no hay porque alarmarse, va a pasar”, apuntó.
Dijo que los meses de mayo y junio son los más calientes del año en San Luis Potosí, y en la huasteca este año en particular se estará enfrentando un fenómeno llamado anomalía de temperatura, que provocará que las temperaturas estarán más elevadas de lo normal, dependiendo de la zona, esta condición no va a ceder hasta agosto o septiembre cuando lloverá un poco. “Es mejor que nos preparemos para una condición intensa provocada no por un déficit de la precipitación, sino por una onda de calor”, agregó.
El doctor José Antonio Ávalos Lozano, reiteró que la sequía puede ser provocada por una disminución en la cantidad de lluvias o un exceso de temperatura. En este caso, nos estamos enfrentando a un fenómeno anormal de una elevada temperatura que va a exigir un gasto extraordinario en los cultivos, en vida cotidiana, en los usos que normalmente tenemos porque esta se va a estar evapotranspirando.“La sequía no va a ser tan alarmante como el año pasado donde tuvimos pérdidas extraordinarias, pero si va a ser muy intensa, con consideraciones en la disminución del agua necesaria para la vida cotidiana y la más preocupante relacionada con los incendios”, señaló el experto de la UASLP.