Jue. Nov 28th, 2024

Palestra / San Luis Potosí

La Comisión Nacional del Agua (Conagua) hace un llamado a todos los sectores, entre ellos la sociedad en general, para disponer adecuadamente de la basura, ya que puede obstruir la infraestructura de drenaje de aguas negras y pluvial. Mantener los desagües libres permite una operatividad óptima y reduce los riesgos de inundaciones.

Conagua, de manera permanente, pero sobre todo en el periodo previo al inicio de la temporada de lluvias, establecida estadísticamente el 15 de mayo, suma esfuerzos con las autoridades de los tres órdenes, mediante acciones de desazolve y limpieza de infraestructuras de drenajes y drenes de desagüe, para contribuir a su adecuado funcionamiento, independientemente de que sean responsabilidad municipal, estatal o federal.

Una muestra de ello es que, en lo que va de 2024, mediante las Brigadas de Protección a la Infraestructura y Atención de Emergencias (PIAE), de la Subdirección General de Infraestructura Hidroagrícola, se ha trabajado en casi 113 mil metros de ductos de drenajes y casi 2 mil pozos de visita, a través de los cuales se ha retirado el azolve que obstruye el paso del agua.

Estas acciones son de particular relevancia, debido a que desde los primeros escurrimientos se registra el arrastre de diversos materiales, sobre todo basura, lo que genera taponamientos en la infraestructura y, como consecuencia, encharcamientos y hasta inundaciones.

Asimismo, es fundamental evitar que los cauces de los ríos sean utilizados como depósitos de basura, con el fin de mantener su capacidad de conducción y, con ello, evitar desbordamientos, inundaciones y daños a la población y sus bienes.

En ese sentido, para favorecer el correcto funcionamiento de los canales, estructuras de captación de drenaje y corrientes naturales, Conagua implementa actividades conjuntas con autoridades locales como poda de árboles, desmalezado, despalme, retiro de basura, troncos y escombros.

Conagua reitera la disposición para colaborar con las autoridades de los tres órdenes, con el fin de llevar a cabo acciones que reduzcan los riesgos de inundaciones, así como para vigilar los sistemas de drenaje y cauces bajo su responsabilidad, pues con la colaboración de todos es posible afrontar de mejor manera la próxima temporada de lluvias.