Sáb. Nov 23rd, 2024

Palestra / La Ratonera

Vaya con el alcalde Enrique Galindo que anda metiendo las narices en la Contraloría del ayuntamiento capitalino para que le informe sus hallazgos en el caso Rich, lo que de suyo descalifica lo que se informe en los próximos días, porque seguramente el resultado quedará a contentillo del jefe.

Es increíble que alguien con su experiencia no conozca el término «imparcialidad» y, en vez de dejar que la contralora Gabriela López y López, haga su trabajo sin presiones, se entere antes que nadie sobre las irregularidades que pudieron cometer uno o varios de sus funcionarios, principalmente por omisión en la salvaguarda de los jóvenes capitalinos.

Inclusive el propio edil podría incurrir en violencia de género, por el simple hecho de andar intimidando de forma inconsciente a la funcionaria que, por su parte, debería dar una explicación del por qué anda informando de este sensible caso al priista, sin haber terminado su indagatoria. Es más, se debería hacer a un lado, porque se volvió juez y parte.

Muy mal por Galindo, el ejemplo personificado de lo que se quiere erradicar en la política del país, de andar presionando a quien se deje para hacer cumplir su propia ley en detrimento de las familias víctimas de los muchachos que perdieron la vida y/o quedaron heridos en esa noche de tragedia en el edificio Alttus.

Enrique Galindo.- Mano negra.

En un hecho que no repara el daño a las víctimas y tampoco puede considerarse nada extraordinario, el vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, Tomás Cruz Perales, ofreció una nueva disculpa o perdón a las víctimas de pederastia en la Iglesia católica potosina.

Con esto, volvió a surgir el nombre del criminal sacerdote Eduardo Córdova Bautista, quien tiene 10 años prófugo de la justicia, para responder por el abuso sexual cometido contra un centenar de niños en la capital.

Lo que hizo el padre Cruz no puede considerarse realmente un acto de arrepentimiento de la Iglesia, toda vez que lo hizo en una declaración, no de forma institucional.

Lo mejor sería la aprehensión del depredador sexual, ya que si nos atenemos a lo que decía el ex fiscal José Luis Ruiz, ahora titular de la SSPC, estuvieron «cerca» de echarle el guante, por lo que hay señales de que sigue vivo y quizá protegido por la propia Iglesia, a juzgar por las acusaciones contra dos arzobispos que se hicieron de la vista gorda ante las denuncias de los ofendidos y sus familias.

Eduardo Córdova.- Una década escondido.

Parece que no sólo se cuecen habas en el Poder Judicial sino en la propia cuatroté, en este caso, a través del INAH, dependencia contra la que estalló el gobernador Ricardo Gallardo y sostuvo que «no sirve para nada».

Y es que resulta que el antropólogo Hugo Cotonieto Santeliz, encargado de despacho del Instituto Nacional de Antropología e Historia en San Luis Potosí, nomás no ha aprobado ninguno de los proyectos del mandatario, ni en la Alameda Juan Sarabia, que seguirá igual de abandonada que siempre pese a ser el principal pulmón del Centro Histórico; ni en el Barrio de San Miguelito, que ha enfrentado un montón de trabas para su modernización.

«El INAH desde el inicio de nuestro gobierno se ha proclamado en cualquier obra de nosotros, siempre en contra», criticó Gallardo, a quien más le hubiera valido que su ex titular de Turismo, Juan Carlos Machinena, siguiera al frente de esa delegación del Gobierno Federal, para que sus proyectos pasaran como cuchillo con mantequilla.

Así como van las cosas, al rato Gallardo saca a relucir su propia lista de adversarios con Cotonieto a la cabeza, algo que se puso de moda en las mañaneras.

Ricardo Gallardo.- Lista negra.