Palestra / Reforma
La construcción del acueducto del Río Pánuco para enviar agua del sur de Tamaulipas hacia la región norte sería vista por los Estados Unidos como una señal de buena voluntad, consideró el Secretario de Recursos Hidráulicos del Estado.
Raúl Quiroga dijo que en medio de la «guerra» por el adeudo de agua de México a los Estados Unidos el citado acueducto enviaría un guiño de ojos a Trump que reclama el pago o de lo contrario impondrá aranceles.
«Entonces, claro que cobra vigencia nuevamente el proyecto de llevar agua del Pánuco a la zona norte, sobre todo, teniendo la sexta presa más grande del país con capacidad sin problema alguno para almacenar los poco más de 630 millones que pretendemos llevar al norte», apuntó.
Lo anterior en medio de las presiones del Presidente Donald Trump de imponer aranceles a México si se resiste a cumplir con la entrega del vital líquido tras un adeudo de más de mil 500 millones cúbicos de agua que se deben pagar a más tardar el próxino 24 de octubre al cierre del ciclo 36.
No obstante, el proyecto encara dos serios problemas: su elevado costo más de 60 mil millones de pesos y de que el visto bueno debe ser dado por la Presidenta Claudia Sheinbaum quien advirtió que es caro, pero sin descartar explorarlo.
«Serviría incluso para mandarle una señal a Estados Unidos de que vamos a llevar agua para aligerar el peso que tenemos ahorita ¿no?», dijo Quiroga.
El funcionario precisó que el Gobernador Américo Villarreal planteó el proyecto de llevar agua de una cuenca con superávit a una, la de la región norte, que vive el peor déficit.
«Hablamos de llevar agua de una cuenca que está tirando agua al mar, alrededor de once mil millones de metros cúbicos anuales, a una cuenca de donde tenemos déficit de 600 millones de metros cúbicos», reiteró.
«O sea, una está superavitaria con un nivel altísimo y otra está deficitaria, es decir, no hay agua para los que estamos, o hay agua en toda la cuenca, no nada más en Tamaulipas», afirmó, «pero en Tamaulipas el impacto es brutal porque vivimos en la parte más baja, y si no escurre agua no tenemos suficiente agua».
Incluso, advirtió que ningún funcionario ni la Secretaría pueden dar luz verde a la obra.
«Es un proyecto de tal magnitud de grande que nadie va a mover un dedo, ni Hacienda, ni Conagua, hasta que la Presidenta (lo apruebe)», aseguró.
¿El Gobierno ha hablado de que ha buscado fuentes de financiamiento alternos para la construcción del acueducto?, se le preguntó.
«Bueno, el tema es que mientras la Federación no dé luz verde, todo queda en estudios que hicimos, el Gobernador, desde hace más de un año, concluyó un estudio, pero, si bien es cierto que fue un estudio a nivel de prefactibilidad, ya nos enseñó el camino de cómo hacerlo», respondió.